Esta es una receta básica que puede ser usada como tal o formar parte de otros platos, atención, es mejor hacer la que vas a consumir porque no dura más de un día en el frigorífico.
10 minutos
- Coco
- Agua
Lo más complicado de la receta es abrir el coco sin hacerte daño, yo abro primero dos agujeritos para extraer el agua (riquísima) y después me lío a martillazos, si hay alguien que tenga una técnica (no digo mejor, me basta con una técnica que sustituya mi primitivismo) por favor que me la pase.
Una vez abierto el coco yo suelo pelar la fina cáscara marrón que tiene porque así los restos van directamente al deshidratador y siempre tengo a mano coco rallado natural y sin conservantes, pero no es necesario pelarlo, al igual que pasa con las almendras. Después de pelado mezclo en la batidora (de jarrra) una parte de pulpa de coco y tres partes de agua, lo bato hasta que sólo queden trocitos minúsculos de coco y lo cuelo con la típica bolsa. Esta es la leche base, pero puedes añadir algún endulzante o una pizca de sal, que es lo que yo hago siempre en los batidos y otras preparaciones, ya que ayuda a resaltar los sabores.